El crecimiento de los niños, sobre todo en sus primeros años de vida, pasa demasiado rápido y desarrollan sus habilidades día a día, adquieren nuevas experiencias y conocimientos a cada momento; por eso, es importante desde los primeros años inculcar la importancia de actividades y responsabilidades. Si no sabes cómo hacerlo o para qué tareas ya esta listo tu hijo de acuerdo a su edad, aquí te dejo algunas sugerencias que puedes empezar a trabajar:
- De los 2 a los 3 años: A esta edad la habilidad motora de tu hija(o) ya está más desarrollada y puede guardar los juguetes que ha usado en el lugar que has destinado para ello, puede colocar su ropa sucia en su canasto, puede doblar su ropa limpia, sacar la basura, ayudar a poner la mesa, ayudar a recoger objetos grandes colocándolos en repisas, traer sus pañales y toallitas húmedas cuando requiera ser limpiado.
- De los 4 a los 5 años: El sentido de responsabilidad y el concepto de que existe una consecuencia ante cada acción ya está mas desarrollado, por ello las actividades que involucren estas situaciones son las ideales. Alimentar a la mascota, regar plantas, ordenar su cama, ayudar a limpiar si se ha derramado o algo, ayudar a despejar la cocina y prepararse un sandwich él solo.
- De los 6 a los 7 años: Su motricidad fina está cobrando más fuerza, ya puede realizar actividades de mayor concentración y precisión, es momento de pedirle que ayude a separar la basura, doblar toallas, acomodar los cubiertos, doblar sus calcetines por pares, pelar papas o zanahorias para elaborar los alimentos.
- De los 8 a los 9 años: A esta edad ya es capaz de medir riesgos frecuentes y ha aprendido a ser responsable de si y lo que implica ayudar al otro, por ello puede hacerse un huevo revuelto o usar la lavadora (enseñándole previamente), puede pasear al perro, lavar el área de las mascotas, avisar cuando el alimento de la mascota se esté acabando, puede recoger la mesa, lavar y guardar los platos, sacudir muebles.
- De los 10 a los 11 años: Están entrando en la edad donde no les gusta hacer actividades que perciben como aburridas, la perseverancia y disciplina son ahora más importantes que nunca porque es momento de enseñarles que hay actividades que queramos o no, deben de hacerse. Limpiar los baños, barrer, trapear, aspirar áreas determinadas, cortar el pasto, aprender a cocer algún botón o calcetín, son actividades ideales a esta edad.
Conclusión: Recuerda que tú eres quien mejor conoce las habilidades de tu hij@. Enseñarle a realizar actividades que le sean útiles en un futuro es una tarea constante que ellos aprenden por medio de la repetición y la perseverancia, esto también les ayuda a ir creando la tolerancia a la frustración que van experimentando.
Al no permitir que ellos participen en las actividades de la casa, no estamos mandando un mensaje de amor y cuidado, más bien, les estamos diciendo que no confiamos en sus habilidades y por eso no dejamos que hagan las cosas.